En qué consiste la fisioterapia de suelo pélvico: técnicas, beneficios y valoración profesional

La fisioterapia de suelo pélvico es una especialidad que ha ganado visibilidad, dejando de ser un tema tabú para convertirse en una solución fundamental para una gran variedad de problemas que afectan la calidad de vida.
No se trata solo de los famosos ejercicios de Kegel, sino de un enfoque integral para prevenir, evaluar y tratar las disfunciones de esta zona tan importante.
No solo es cosa de mujeres tras el parto: hombres y mujeres de todas las edades pueden beneficiarse de este tratamiento. En este artículo te explicamos qué es el suelo pélvico, qué disfunciones pueden afectarlo, cómo se manifiestan y qué puede hacer la fisioterapia para ayudarte.
¿Qué es el suelo pélvico?
El suelo pélvico está formado por un conjunto de músculos, ligamentos y fascias que cierran la parte inferior del abdomen, creando una especie de "hamaca" que sostiene los órganos pélvicos: vejiga, uretra, útero, vagina, recto y próstata.
Además de esta función de sostén, el suelo pélvico participa en la continencia urinaria y fecal, la función sexual, la estabilidad del tronco y la gestión de las presiones abdominales durante actividades tan simples como toser, reír, levantar peso o correr.
Cuando alguno de estos elementos se debilita, se tensa en exceso o pierde coordinación con el diafragma y la musculatura abdominal, pueden aparecer disfunciones que afectan directamente a la calidad de vida.
Disfunciones más habituales del suelo pélvico
Entre las alteraciones más comunes encontramos:
1. Incontinencia urinaria o fecal.
Se trata de la pérdida involuntaria de orina o gases, frecuente en mujeres tras el parto o la menopausia, pero también en hombres después de cirugías prostáticas.
2. Prolapsos.
Consisten en el descenso de uno o varios órganos pélvicos (vejiga, útero o recto) debido a un fallo en el sostén muscular. Se manifiestan como sensación de "peso" o "bulto" en la vagina o el ano.
3. Dolor pélvico crónico.
Puede deberse a contracturas musculares, cicatrices, disfunciones articulares o alteraciones neurológicas, y suele repercutir tanto en la vida sexual como en la emocional.
4. Disfunciones sexuales.
En las mujeres, puede presentarse dolor durante las relaciones (dispareunia), dificultad para alcanzar el orgasmo o falta de sensibilidad; en los hombres, pueden aparecer dolor perineal o problemas de erección relacionados con el tono pélvico.
5. Problemas de evacuación.
El estreñimiento funcional, la dificultad para evacuar o la sensación de no vaciar bien la vejiga también tienen relación directa con un suelo pélvico disfuncional.
Síntomas que pueden indicar un problema
No siempre los síntomas son evidentes. Algunos signos que merecen una valoración fisioterapéutica son:
-
Escapes de orina o gases al toser, reír o hacer esfuerzo.
-
Sensación de peso o presión en la pelvis o genitales.
-
Dolor lumbar o sensación de "tirantez" abdominal.
-
Dificultad para iniciar o terminar la micción.
-
Dolor o molestias durante las relaciones sexuales.
-
En hombres, pérdida de control tras una cirugía prostática o problemas para mantener la erección.
Detectar estos síntomas a tiempo es clave, ya que la fisioterapia ofrece soluciones eficaces sin necesidad de recurrir a tratamientos invasivos.
La valoración del suelo pélvico
El primer paso en fisioterapia de suelo pélvico es la valoración individualizada.
El fisioterapeuta especializado realiza una entrevista y exploración que puede incluir:
-
Análisis de hábitos (miccionales, intestinales, posturales y deportivos).
-
Evaluación del tono, fuerza y coordinación muscular mediante palpación externa o interna.
-
Valoración de la postura global y del patrón respiratorio.
-
Identificación de posibles cicatrices o adherencias que limiten la función.
Esta valoración permite diseñar un plan de tratamiento personalizado y seguro.
Técnicas utilizadas en fisioterapia de suelo pélvico
La fisioterapia combina diversas herramientas para recuperar la función, el control y la fuerza del suelo pélvico. Las principales son:
1. Ejercicios de suelo pélvico (Kegel y variantes)
Son contracciones voluntarias y controladas de la musculatura pélvica. Mejoran la fuerza, la resistencia y la coordinación. Aunque pueden parecer sencillos, deben ser guiados por un profesional, ya que realizar mal el ejercicio puede aumentar la presión abdominal y agravar el problema.
2. Trabajo postural y respiratorio
El suelo pélvico actúa en conjunto con el diafragma, el abdomen y la musculatura lumbar. Por eso, la fisioterapia incluye educación postural y ejercicios de respiración diafragmática, que ayudan a equilibrar las presiones internas y reducir la sobrecarga sobre la pelvis.
3. Técnicas hipopresivas y método Tronco 5P
Los ejercicios hipopresivos, realizados en apnea respiratoria y con activación postural, reducen la presión intraabdominal, tonifican el abdomen profundo y favorecen la elevación de los órganos pélvicos.
El método Tronco 5P, por su parte, trabaja la estabilidad postural y la activación refleja del suelo pélvico mediante el uso de una base inestable (tronco). Ambas técnicas son muy útiles tanto en prevención como en rehabilitación.
4. Medidas conductuales
El tratamiento también incluye educación en hábitos saludables: aprender a ir al baño sin esfuerzo, regular el tránsito intestinal, evitar el estreñimiento, controlar los pesos y mejorar la higiene postural. Estas medidas previenen recaídas y complementan el trabajo fisioterapéutico.
5. Tecnología aplicada
La fisioterapia de suelo pélvico dispone de herramientas tecnológicas que complementan el tratamiento manual:
-
Biofeedback: permite visualizar en una pantalla la contracción muscular, ayudando al paciente a mejorar la percepción y el control.
-
Electroestimulación: utiliza corrientes suaves para activar los músculos cuando existe debilidad o falta de control voluntario.
-
TENS (estimulación nerviosa transcutánea): reduce el dolor y mejora la función neuromuscular.
-
Radiofrecuencia y ondas de choque: estimulan la regeneración del colágeno, aumentan el flujo sanguíneo y mejoran la elasticidad de los tejidos.
Estas tecnologías aceleran la recuperación y potencian los resultados del trabajo activo.
Fisioterapia de suelo pélvico en hombres y mujeres
Aunque se asocia habitualmente a mujeres, la fisioterapia de suelo pélvico es igual de relevante para los hombres.
En el caso femenino, resulta esencial durante el embarazo, el posparto y la menopausia, etapas en las que las hormonas y los cambios físicos afectan directamente al tono muscular.
En los hombres, la fisioterapia es clave tras intervenciones de próstata, en la incontinencia urinaria, el dolor perineal o la disfunción eréctil.
El abordaje se adapta a cada caso, con objetivos como mejorar la fuerza, la resistencia, la coordinación y la percepción corporal.
Cuidar el suelo pélvico es cuidar tu salud
El suelo pélvico es la base de nuestro cuerpo y tiene un impacto directo en la calidad de vida, el bienestar y la autoconfianza.
La fisioterapia especializada ofrece soluciones seguras, personalizadas y eficaces, que van mucho más allá de unos simples ejercicios.
En Evexia Salut contamos con fisioterapeutas especializadas en suelo pélvico que te ayudarán a valorar tu caso y recuperar tu bienestar de forma integral.
La prevención y el tratamiento a tiempo son la clave para una vida sin molestias.
Reserva tu cita en Evexia Salut y da el primer paso para cuidar tu base.
